Comenzó a trabajar asiduamente en 1925, y en 1927 hizo su primera exposición en la Galleria Bragaglia, a la que siguió en 1928 otra en la Galleria Doria.Sus primeras obras se enmarcaron en el realismo mágico, con figuras forzadas y un gran valor simbólico (El despertar de la rubia sirena, 1929).En 1928 fundó, con Mafai, Renato Marino Mazzacurati y Antonietta Raphael, la Escuela de la Via Cavour, opuestos al conservadurismo y filofascismo del Novecento.Entre 1929 y 1930 realizó su mayor producción, con obras donde denunciaba la corrupción de la Roma papal y el catolicismo contrarreformista (El cardenal decano, 1929-1930; La cortesana romana, 1930; Los hombres que se giran, 1930).Su obra fue expuesta en la Documenta I de Kassel, en 1955.