Sarita Colonia

Tras cuatro meses en Huaraz, Rosalía fallece y deja a la familia en manos de Sara.

[3]​[8]​[9]​ Sara trabajaba en una panadería de Huaraz para ayudar a los gastos familiares (familia que, tras el segundo matrimonio del padre, había crecido con tres niños más).

Sarita fue enterrada en una fosa común en el Cementerio Baquíjano y Carrillo I del Callao.

Prácticamente se habían apropiado del pampón y haciendo uso de sus propios recursos, edificaron para Sarita Colonia una capilla muy simple, cuya arquitectura, observa Gonzalo Portocarrero es semejante a las casitas, lisas y funcionales de muchos pueblos jóvenes.

Cuenta un antiguo devoto de Sarita, un peluquero bastante mayor, vecino en los barracones del Callao (un lugar bastante pobre, N.E.

Durante la década de 1970 comenzó una migración masiva desde el área rural hacia Lima.

[10]​ Cuando las autoridades del puerto del Callao intentaron allanar la fosa común donde está enterrada Sarita Colonia (y otras "almas milagrosas") para ampliar el cementerio, los creyentes impidieron que dicha acción se llevara a cabo.

Todos los días, los administradores del culto, Esther Colonia Zambrano y otros parientes, esperan dentro de la capilla, en tanto ofrecen velas en venta.

Así es recibida la gran cantidad de gente sencilla que a diario la visita para pedirle “un milagrito” y para testimoniarle su gratitud.

En ocasiones algunos devotos prefieren manifestar su gratitud, ofreciendo una misa a Sarita en alguna iglesia y exhiben la convocatoria en la capilla.

En el 2007, el canal de televisión peruano Frecuencia Latina, emitió una miniserie titulada Por la Sarita,[18]​[19]​ la cual hacía referencia a la vida y milagros de esta santa popular, quien en la ficción era interpretada por la actriz Mayella Lloclla.

[22]​ En 2019, se realiza un cortometraje chileno haciendo referencia al restaurante Santiaguino que honra el nombre y la figura de Sarita Colonia.