Santuario de San Expedito

Al santuario se accede por la Ruta Nacional 141, que está dotado de una iglesia católica.

Es el único santuario que venera a San Expedito en Argentina.

Según cuenta la historia, San Expedito ayudó al marido de la bermejera a superar su adicción al alcohol, con lo que en el lugar se despertó una fe muy profunda por aquel.

La comunidad de Bermejo continuó con el culto al santo fervorosamente hasta la actualidad.

Gracias al esfuerzo de años en 1996 se pudo comenzar a construir una capilla.