Santos Amaro

Desempeñaba la posición de cácher, difícil para él por su elevada estatura: (1,92 m).Después jugó la tercera base, pero su verdadera posición fue la de jardinero derecho, sobresaliendo por su poderoso brazo.Cuando colgó los spikes de jugador activo, en 1955, tenía 0,314 de promedio global, con 1.339 hits en 4 mil 267 veces con el madero.En 1951 sustituyó a Martín Dihigo como mánager del Águila de Veracruz, equipo al que llevó a la conquista del campeonato en 1952 y 1961.Su estirpe de pelotero se manifestó, plenamente, en su hijo Rubén, quien jugó 11 años en las Ligas Mayores.