Santo Tomás (Velázquez)

El apóstol Santo Tomás del Museo de Bellas Artes de Orleans es un óleo atribuido a Velázquez, perteneciente a su primera etapa y pintado en Sevilla entre 1618 y 1620.

Julián Gállego destacó la calidad de las manos, estudiadas del natural, con las que sujeta en la derecha un libro abierto encuadernado en pergamino y en la izquierda una pica o lanza que lleva al hombro.

El modelo es el mismo del San Juan en Patmos y quizá el del estudio de Cabeza de perfil del Museo del Hermitage que aparece en los almuerzos de San Petersburgo y Budapest: joven, con barba incipiente y pómulos marcados, si acaso más consumido aquí para subrayar el carácter ascético.

La iluminación intensa, dirigida desde la izquierda, ha llevado a que se recuerde con frecuencia a propósito de este cuadro el naturalismo caravaggista y su sistema de iluminación tenebrista.

[2]​ Su identificación como el apóstol santo Tomás, habitualmente representado con una escuadra, es posible además de por la inscripción que lleva en la parte superior («S.