Sobre estos llanos discurren corrientes de deshielo formando patrones entrecruzados.
Son grandes proveedores de material que puede ser trasladado por el viento y los mayores depósitos glaciares.
[1] Los sandar se encuentran en áreas glaciales, como en el archipiélago Svalbard o en las islas Kerguelen.
Esta actividad da lugar a surgentes masivas (llamadas también jökulhlaups), entre las cuales cabe destacar la de 1996, cuyo flujo pico se estima alcanzó los 45.000 m³/s, valor que empequeñece al pico promedio de 200-400 m³/s del verano islandés.
La cota del sandur se elevó en consecuencia más de 10 metros en algunos lugares.