Sandra Bem

Posteriormente decidieron vivir por separado, pero seguir casados hasta la muerte de Sandra, en el año 2014.

Su disertación se centró principalmente en el problema de procesamiento cognitivo que podrían solucionar los relacionados con niños muy jóvenes.

[6]​ Bem centró su búsqueda también en la psicología clínica, hasta que se retiró en 2010, tras detectarsele Alzheimer.

El equipo-matrimonio ha reclamado altamente como testigos en los impactos negativos que producen los estereotipos en función del sexo, tanto en lo individual como en lo social.

Hoy, el igualitarismo ya no es un concepto nuevo, porque la mujer ha dado un paso arriba, reclamando el respeto y valor que merece.

[10]​ Su legado ha contribuido como sostén psicológico del fundamento de los movimientos feministas, y el trabajo en conjunto con su marido demostró que se puede ejercer un planteo inteligente en la sumatoria de géneros, sin exclusiones y en concordancia recíproca.