San Esteban Tizatlán

En él se ubica la zona arqueológica de Tizatlán del periodo postclásico.

También se accede tomando la carretera Santa Ana - Tlaxcala encontrando el retorno denominado La Garita.

Motenehuatzin regresó a Tlaxcallan como triunfador del concurso, y al abrazarlo su padre le dijo: Bien mereciste llevar el nombre de Motenehuatzin, tú regirás los destinos de Tizatlán.

En San Esteban Tizatlán, se llevan a cabo actividades artesanales como es el tallado en madera, del cual, se derivan muchas modalidades, tales como: bastones (rayados, veteados, de mando etc.) lapiceros, teponascle en diversos tamaños, varas talladas con diversos temas, por mencionar algunas, incluso se han llegado a elaborar las coronas que han utilizado las reinas de la feria de Tlaxcala, pues estas han sido de madera.

Las primeras cuadrillas fueron dos: Xicohtencatl y Cuauatzala, por ser los barrios en donde empezaron a realizar sus danzas, integradas por un número menor a 24 parejas de danzantes hombres, a estas cuadrillas se le fueron integrando más danzantes hasta que en el año 1965 se vuelven camadas, desde 24 hasta 60 parejas de danzantes mixtos por camada.

Una vez allí el espíritu le decía a Pánfilo Sánchez que excavara para poder entregarle su tesoro.

La comunidad al enterarse de tal suceso decidió, por su cuenta, cavar el sitio que, según Sánchez, Xicoténcatl le señalaba; pero en vez del "tesoro" fueron hallados los altares policromos que hoy podemos apreciar.

En 1980 Daniel Molina excavó en la parte posterior de la Capilla abierta y encontró varios entierros, en ese mismo año Roberto Gallegos Ruiz realizó trabajos en los lugares aledaños a los altares, consolidó el muro sur, limpió y escombró el sitio; también estableció una nomenclatura para las construcciones del sitio.

Es hasta 1990, con el Proyecto Cuatro Señoríos, cuando nuevamente se realizan excavaciones de manera intensiva.

Durante este proyecto se liberó el muro suroriente con su escalera de acceso y se realizó una nueva lectura e interpretación de las pinturas que decoran a los altares policromos.

Como ya se ha señalado, la estructura principal resguarda los altares policromos que muestran elementos pictóricos en sus caras oriente, poniente y sur, quedando la cara norte empotrada a una columna de planta semicircular.

Por las características descritas se puede pensar que este altar sirvió para la investidura de los guerreros jaguar.

Otros lugares que vale la pena visitar son la Capilla abierta del siglo XVI que se encuentra construida sobre una plataforma prehispánica Esta capilla tiene planta hexagonal, se abre hacia el frente por cinco arcos, el de en medio se halla cerrado por el ábside del templo de San Esteban.

El arco triunfal es la parte que más deslumbra con sus colores y sus formas.

Cerrando a los ángeles aparecen dos más con incensarios y una serie de querubines que enmarcan la escena.

En el muro norte del presbiterio está otro conjunto de tres pinturas en el mismo orden que las anteriores con los temas de la ascensión, la resurrección y la manifestación a los apóstoles.

En su interior se guardan, entre otros bienes muebles, un cuadro que muestra el bautismo de los señores tlaxcaltecas hecho por José de Sánchez; en la sacristía destacan dos documentos pictográficos, el primero está elaborado en tela y representa por una de sus caras un mapa del pueblo y por la otra una genealogía, este documento está fechado en 1760; existe otro documento elaborado en papel y con la misma fecha que muestra solo la parte geográfica del documento anterior.

Los jardines cubren poco más de 8 hectáreas que muestran diversas poblaciones vegetales.