Siempre tiene regaliz Etimológicamente, sambuco significa “saúco”; es decir, el arbusto conocido como Sambucus nigra L., según Zingarelli.
La sambuca puede servirse pura después del café o simplemente para tomar un trago.
Ésta es una elección óptima para degustar la sambuca: además de ser agradablemente fresca, ciertamente el hielo le resalta mucho las propiedades aromáticas.
En el bar bastará pedir una "sambuca con mosca", y el camarero entenderá al vuelo.
El grano de café debe resaltar el dulzor y la frescura del licor.
El característico gusto de la sambuca, dulce pero al mismo tiempo fuerte, va muy bien con el aroma del café.
Debe utilizarse un vasito estrecho (tubo), encender la sambuca en su superficie, tapar el vaso con la palma de la mano y agitar el vaso un poco mientras se queda pegado a la palma de la mano.
Apartar la mano, inhalar el aroma que desprende y en seguida beberla toda de un trago.