En 2013 conoció al que sería su futuro marido, James Harris, a través de un amigo común.
[3] En 2014, un año después de que Karwah y Harris empezaran su relación, la epidemia del virus del ébola golpeó Liberia, así como a los países vecinos de Guinea y Sierra Leona.
Salomé, su hermana Josephine y James Harris, también afectados por el virus, ingresaron en una unidad de Médicos sin Fronteras en Monrovia para ser tratados junto a otros pacientes afectados por el virus.
[3] La prioridad de Salome Karwah era ayudar a su hermana, Josephine Manly, que estaba embarazada cuando contrajo el ébola.
La cuidó, cambiándole la ropa y limpiando los fluidos que contenían el virus, y durante este tiempo le ocultó la noticia de la muerte de su madre, temiendo que tuviera un efecto perjudicial en su salud.
El personal de Médicos Sin Fronteras (MSF) había observado que durante su estancia en el hospital como pacientes, Karwah y Harris habían mostrado interés por otras víctimas del ébola, aún a riesgo de su propia salud.
Salome Karwah regresó al centro en el que había visto morir a sus padres, esta vez como asesora y enfermera, un mes después de su recuperación.
Harris finalmente entró en Emergencias y él mismo cogió una silla de ruedas para llevar a su mujer al interior del edificio.
"[1][3] Harris contactó con un epidemiólogo llamado Dr. Mosoka Fallah, que llegó al hospital tres horas más tarde y finalmente admitieron a Karwah.
[7] Los reconocimientos llegaron de todo el mundo, incluyendo a Médicos sin Fronteras, que publicaron una declaración,[8] "La experiencia de Salomé con el Ébola le hizo tener una enorme empatía por los pacientes a los que intentaba sacar adelante, demostrando siempre una dedicación absoluta y una profesionalidad encomiable.