Sadaharu Oh

Además, fue el seleccionador del equipo japonés que ganó el Clásico Mundial de Béisbol 2006.

Comenzó a jugar béisbol como pitcher y en 1957 formó parte del equipo del instituto Waseda Jitsugyo que ganó el campeonato juvenil nacional, donde fue el lanzador titular a pesar de sufrir una grave lesión.

En su primera temporada, Sadaharu promedió un bateo de .161 con siete home runs en 94 juegos y no cuajó un buen debut.

Para que su carrera no se estancase, los Giants contrataron como preparador a Hiroshi Arakawa, que le ayudó a mejorar su forma física y su estilo de bateo con una técnica inspirada en el aikido.

Bajo su liderazgo, el equipo ganó una Liga Central en 1987 pero no pudo hacerse con ninguna Serie de Japón.

A pesar de que era cancerígeno, los médicos lo detectaron en su fase inicial y el entrenador superó la enfermedad.