La táctica implica recortar los servicios provistos por el gobierno que sean más visibles y apreciados, estos pueden ir desde servicios populares como los parques nacionales y bibliotecas hasta empleados públicos altamente valorados como profesores o bomberos.
El nombre proviene del supuesto hábito del Servicio Nacional de Parques de decir que cualquier recorte de su presupuesto llevará al cierre inmediato del increíblemente popular Monumento a Washington.
[4] La revista conservadora estadounidense National Review ha comparado la táctica con el chantaje o incluso toma de rehenes.
[2] El término fue utilizado por primera vez luego de que George Hartzog, el séptimo director del Servicio Nacional de Parques, cerrara populares parques nacionales como el Monumento a Washington y el Parque nacional del Gran Cañón por dos días a la semana en 1969.
En respuesta a las quejas, el congreso eventualmente restauró el financiamiento, y Hartzog renunció.