El síndrome de Gobbi es una asociación de epilepsia, calcificaciones occipitales y enfermedad celiaca que fue identificada por primera vez en 1991 por Giuseppe Gobbi como un síndrome independiente.
La epilepsia está principalmente caracterizada por crisis convulsivas originadas en los lóbulos occipitales.
Gobbi enfatizo que ocurre casi exclusivamente en personas de origen italiano.
Durante mucho tiempo estas calcificaciones fueron interpretadas como parte del síndrome atípico de Sturge-Weber.
Calcificaciones puntiformes pueden estar asociadas con crisis convulsivas frecuentes de difícil control y resistentes al tratamiento farmacológico, también grandes calcificaciones pueden estar asociadas con enfermedad benigna.