Ramón Sánchez Pizjuán

Abogado de profesión, siempre quiso defender causas pese a no cobrar por ello en muchas ocasiones.

Cuando el presidente de la Federación Española, Javier Barroso Sánchez-Guerra, le pide a Sánchez-Pizjuán que marche a Madrid para ocupar el cargo de vicepresidente del organismo federativo, Ramón Sánchez-Pizjuán acepta porque considera que deja al Sevilla en buenas manos y que desde Madrid podía seguir ayudando al Sevilla, como así sucedió.

Esa temporada en Nervión fueron derrotados por cuatro goles a cero los tres mejores: Real Madrid, Barcelona y Valencia.

Este, tras pasar por los mejores equipos del mundo, poco antes de su muerte en Venecia pronunció la siguiente frase: «De todos los presidentes que he conocido, sin duda, el mejor ha sido Ramón Sánchez-Pizjuán, presidente del Sevilla» El entierro, que fue un clamor por lo mucho que le querían muchos de los sevillistas y sevillanos, se recordará con el paso de los años del mismo modo que se recuerda la frase pronunciada por su predecesor en la presidencia del Club - Ramón de Carranza Gómez Pablo – en el entierro: «Querido Ramón, ahora te vamos a dar tus amigos, entre los que me honro, cristiana sepultura, y al día siguiente a la entrega de tu cuerpo a la tierra, nos ponemos manos a la obra, y tu sueño de que el Sevilla FC tenga un gran estadio se verá hecho realidad.

Ramón, vete tranquilo al cielo, que tus deseos serán cumplidos".

Durante su mandato, el Sevilla FC consiguió tres Copas de España (1935, 1939 y 1948).