Nació en el matrimonio formado por don Baltasar Castro Godoy y doña Filomena Rojas Francino.
Ingresó muy pequeño al Seminario de los Santos Ángeles Custodios, en Santiago.
Desde sus años de seminarista demostró mucho ingenio y dedicación al estudio.
De inmediato, el primer obispo, Monseñor Eduardo Gimpert Paut, conocedor del talento y espíritu organizador del activo prelado, lo designó, en 1927, asesor de los estudiantes católicos.
Este celo suyo, no impidió que se clausurara por un breve lapso el establecimiento, debido a una sublevación estudiantil.