Heredero del buhonero medieval, en el siglo XXI occidental sobrevive en asociación con chamarileros y cartoneros.En el pasado, se trataba de un individuo que recorría las calles de una ciudad con una carreta tirada por un caballo, donde iba recolectando harapos y viejos utensilios que la gente ya no utiliza para venderlos en otros pueblos.En Inglaterra, por ejemplo, la expresión que traduce ropavejero es «rag and bone man» (literalmente, el hombre de las prendas viejas y los huesos) y se refiere a la recogida de prendas viejas y huesos, que se utilizaban para hacer pegamento, lijas u otras herramientas.En la España bajomedieval y renacentista, el vocablo trapero se usaba para denominar a ciertos mercaderes de paños.Crearon su propio gremio que acogía a los ocupados en la búsqueda de trapos, papel, vidrio, metal y otros materiales que se echaban como inservibles a las calles y basureros.