Wolbach se reserva el crédito de su primera y detallada descripción del agente etiológico en 1919.
Claramente lo reconoce como una bacteria intracelular frecuentemente hallada en célula endotelial.
El núcleo era con frecuencia completamente llenado con diminutas partículas y se distendía.
Wolbach también reconoce su similitud con el agente del tifus y de la fiebre fluvial del Japón, no cree que la designación 'rickettsia' sea apropiada; y propone Dermacentroxenus rickettsi.
Emile Brumpt encuentra que el agente etiológico de RMSF, a pesar de algunas incertidumbres sobre sus propiedades, lo pone en el género Rickettsia y en 1922 propone el nombre Rickettsia rickettsii.