Entre 1998 y 2000 se vio implicado en el llamado «escándalo Festina» y fue acusado de dopaje e incluso sancionado, lo que no le impidió seguir rindiendo a buen nivel tras cumplir la sanción.
Una anterior al 1998, año del Affaire Festina y otra posterior, cuando volvió de la sanción.
En 1991, inició su carrera profesional, a lo largo de la cual militaría en los equipos RMO (1991-1992), Festina (1993-1998), Polti (1999-2000), Domo-Farm Frites (2001-2002) y Quick Step-Davitamon (2003-2004).
Además, Ullrich le sacaba gran ventaja en la general, lo cual hacía difícil que ningún ataque prosperase.
En su etapa posterior al Escándalo Festina, a partir de 2001, pasó a ser un corredor menos explosivo pero más inteligente, consiguiendo victorias importantes mediante escapadas a lo lejos, donde su antigua condición de escalador y su experiencia, le hizo triunfar sobre sus compañeros de escapada.