[2] Luego de disputar ese partido, se fue de inmediato a Argentina a formar parte del Club Atlético Huracán a pedido de los dirigentes que habían estado presente en tal encuentro y que habían visto su actuación.
En marzo de 1956 volvería a Paraguay, donde el conjunto de Olimpia le haría una oferta que no pudo rechazar, pues él estaba planeando regresar a Cerro Porteño; este hecho es considerado una de las primeras grandes traiciones del futbol guaraní.
[1] En 1957 después de su paso por el Decano, emigra nuevamente, esta vez a Perú.
Este equipo fue el Centro Iqueño, otro conjunto que llevaba los colores blanco y negro en su uniforme.
En 1960, junto a su compatriota Adolfo Riquelme, pasa a las filas del Club Alianza Lima, pues sus actuaciones en el medio local no pasaron desapercibidas hasta ese momento.