Una vez terminados sus estudios en 1928, se dedicó a la docencia e impartió clases por toda Inglaterra sobre historia egipcia.
Ocupó dicho cargo hasta 1947, y durante esos dos años también se dedicó a la traducción de clásicos griegos.
Un año más tarde, en 1962, prosiguió con sus clases sobre Historia Antigua en la Universidad de Connecticut donde permanecería los próximos once años.
A este patrón obedecen sus primeros trabajos como, por ejemplo La caza del ganso salvaje (1936), El Profesor (1938), El Aeródromo (1941) y ¿Por qué fui asesinado?
Warner dio un giro hacia la novela histórica, alcanzando su cénit en el campo de la falsa biografía.