[1] Tras su marcha de Comité Cisne en 1988,[2] Goñi firmó con Warner Music un contrato discográfico bajo el cual comenzó a publicar trabajos con el rock americano como base musical.
A pesar de mantener una formación primaria integrada por Rafael Pico, Sergio Roger y Jorge Lario en los álbumes Revólver y Si no hubiera que correr, Goñi planteó Revólver desde su inicio como un proyecto personal a modo de seudónimo bajo el que ocultar su nombre personal.
Su último álbum en directo es "Básico IV", grabado en el Teatro Circo Price de Madrid en 2019.
El músico Carlos Goñi abandonó el grupo valenciano Comité Cisne tras un intento por tomar el control del grupo, dada la confrontación de estilos entre Goñi y José Luis Macías: mientras el primero apostaba por un sonido afín al rock americano, Macías fue partidario de un mayor acercamiento a la música británica.
[5] Al no producirse un consenso, Goñi abandonó el grupo y formó Revólver junto a Rafael Picó.
[7] El debut del grupo, titulado Revólver, se grabó en los Estudios Mediterráneo de Ibiza y obtuvo una escasa repercusión mediática.
Según comentó Goñi: «Ese disco muestra por primera vez mis verdaderas intenciones musicales.
[8] Sin embargo, el sonido contó con la desaprobación del propio Goñi, que criticó el trabajo de Fernando Sancho como productor musical.
[9] En su siguiente trabajo, Si no hubiera que correr, Goñi volvió a contar con la colaboración de Rafael Pico, Sergio Roger y Jorge Lario, que grabaron el álbum en diversos estudios de Londres, Zúrich y Madrid.
[14] La fuerte influencia del músico estadounidense Bruce Springsteen en el sonido de canciones como «El Dorado», «Por un beso» y «Esperando mi tren» hizo que algunos medios de comunicación comenzaran a llamarle el «Bruce Springsteen español».
En su momento se me reprochó que sonara demasiado parecido a Springsteen, lo cual puede resultar gracioso si tenemos en cuenta que Oasis suena demasiado parecido a The Beatles y la crítica británica les ha calificado como el mejor grupo de pop de la década.
Bruce Springsteen ha sido una figura capital para mí, y hacer un disco inspirado en su estilo era algo vital».
[8] Sin embargo, El Dorado incluyó también géneros musicales que comenzaron a suscitar el interés de Goñi como el tex-mex en «Por un beso» y nuevamente el rock americano en «No va más», que alcanzó el número uno en la lista de los 40 Principales.
[17] Tras promocionar El Dorado, Goñi se trasladó a Los Ángeles (California) para grabar su quinto álbum, Calle Mayor, publicado en otoño de 1996.
Según sus propias palabras: «En este disco hay canciones con otra manera de escribir, más dura.
Un familiar me dijo que uno empieza a escribir bien por fuera cuando está bien por dentro, y Calle Mayor es un disco tremendamente externo».
[21] Tras una nueva gira, Goñi planteó a su compañía discográfica la posibilidad de grabar un álbum en Irlanda con Glossop como productor.
[23][24] Tras una extenuante gira que finalizó en octubre de 1998, Goñi decidió tomar un descanso musical durante dos años, en los que aprovechó para crear su propio sello discográfico, Nena Records, y su propio estudio de grabación, Estudios Mojave, en L'Eliana, a imagen y semejanza de los Groove Master Studios propiedad del músico Jackson Browne en el cual grabó Calle Mayor.
[28] Además, volvió a tratar temas sociales como la violencia de género en «Lo que Ana ve» y el abandono animal en «Odio».
[29] Ligado al sonido, gran parte de las canciones incluyeron mensajes críticos contra aspectos como la telebasura en «Planeta Prozac», el racismo en «Mestizo», la vida en la ciudad en «Lecho de rosas» y el desastre del Prestige en «Olas muertas».
[55] El álbum, grabado en formato trío junto a Bagües y Nemesio, fue precedido por el sencillo «Entre las nubes», publicado en diciembre de 2014.