Ren (mitología)

El jeroglífico que compone la palabra Ren es el signo de una boca "R" y una ondulación "N".

Aunque parece evidente que este jeroglífico posee un marcado simbolismo, no se ha esclarecido su significado, que pudiera ser simplemente fonético.

A menudo la prolongación o modificación del Ren suponían un acto honorífico en el que el individuo podía obtener reconocimiento por un acto realizado o una circunstancia social.

El Ren era un nombre único para cada persona que permitía que el hombre perdurara; se creía que este no moría del todo mientras su Ren fuese pronunciado, es decir, mientras el nombre del difunto no fuera olvidado por completo.

Esto explica por qué los faraones y otros personajes influyentes hacían enormes esfuerzos en preservar su nombre, inscribiéndolo una y otra vez en los monumentos que construían, en tumbas, en documentos, etc., y explica también por qué la damnatio memoriae era un castigo tan severo para ellos.