La historicidad de este reino, basada en la narración dada en el Sulalatus Salatin (Anales Malayos), es el tema de debates académicos, y muchos historiadores consideran a su último gobernante Parameswara (o Sri Iskandar Shah) como una verdadera figura histórica.
Sin embargo, fue reclamado por dos potencias regionales en ese momento, Ayutthaya desde el norte y Majapahit desde el sur.
Hacia 1288, las fuerzas expedicionarias navales de Singhasari con éxito saquearon Jambi y Palembang y pusieron a Srivijaya a su merced.
Se produjeron rebeliones contra el gobierno de Java y los príncipes malayos que huían intentaron revivir el imperio, que dejó el área del sur de Sumatra sumida en el caos y la desolación.
Históricamente, los Orang Laut eran muy leales a los reyes malayos.