El terreno tenía una extensión de 35 kilómetros desde el Río Santa Ana hasta la Sierra de Santa Ana hacia el este.
Dos terrenos fueron cedidos a Bernardo y Teodosio Yorba, descendientes de José Antonio Yorba.
En 1834, el gobierno mexicano registra a Bernardo Yorba como beneficiario del Rancho Cañón de Santa Ana.
En 1846, el gobierno mexicano registra a Teodosio Yorba como beneficiaro del Rancho Lomas de Santiago, ambos terrenos manteniendo una asociación con los nombres Santiago y Santa Ana.
Las actuales ciudades de Santa Ana, Orange, Costa Mesa, Tustin y Yorba Linda, en California, Estados Unidos, se ubican en lo que era el Rancho Santiago de Santa Ana.