Ramón Godó
Época en que su padre y su tío gestionaban las delegaciones comerciales en Bilbao y Oviedo de la empresa familiar de los Godó.[2] Ramón Godó fue el primer Conde de Godó, título que recibió en el año 1916 de manos del rey Alfonso XIII.Ramón Godó Lallana era un hombre cojo, con un problema de sordera y casi ciego de un ojo, pero con una gran inteligencia y talento para las finanzas.[3] Fue su hijo, Carlos Godó Valls, segundo Conde de Godó, que en 1965 instauró un premio periodístico con su nombre, en honor al centenario de su nacimiento.En la población de Copons (Barcelona) donde Ramón Godó Lallana tenía una casa, existe una plaza con su nombre como homenaje al empresario catalán.