Rajah Matanda
[3][4][1] "Rajah Matandâ" significa "viejo gobernante" en Tagalo,[2] y Joaquín afirma que el origen hindú-islámico del término "Rajah" indica que las casas nobles de Maynila en ese momento estaban organizadas de acuerdo con una orientación social musulmana,[2][5] aunque los registros españoles indican que la gente común de Maynila practicaba el pag-aanito.[8] Los detalles adicionales sobre Raja Matanda a veces se derivan de relatos genealógicos que lo mencionan, pero estos se centran en la genealogía de Ache y, por lo tanto, no brindan detalles sobre eventos específicos.El sultán respondió otorgando a Ache un puesto como comandante de sus fuerzas navales.[8] Fue un estricto ejecutor del gobierno islámico en Brunéi y Filipinas mientras libraba la guerra contra Tondo.El sultán lo elogió por saquear con éxito la ciudad budista de Loue en el suroeste de Borneo, que se adhirió a la antigua religión y se resistió a la autoridad del sultanato.[1] (Luciano PR Santiago señala que esta práctica ayuda a explicar las estrechas interrelaciones entre las casas gobernantes en Manila, Brunéi y Sulu.[7] Como resultado, Ache fue capturado y llevado a bordo del barco de Elcano.Luis Cámara Dery dice que cuando De Goiti llegó en 1570, el rajá Matanda ya había cedido la autoridad a su sobrino y heredero aparente, el rajá Sulayman, aunque todavía conservaba una influencia considerable.Estaba en Cebú cuando escuchó por primera vez sobre un asentamiento fortificado y bien abastecido en el norte, y envió mensajes de amistad a su gobernante, Rajah Matanda, a quien se dirigió como "Rey de Luzón".Pero justo cuando Matanda estaba recibiendo a De Goiti en la orilla, Rajah Sulayman y su grupo llegaron, adoptando una postura mucho más agresiva hacia los extranjeros.El autor anónimo de la relación, explicando la costumbre tal como la entendía, dice:[6] Según una investigación de archivo del historiador Luis Camara Dery,[12] Rajah Matanda had at least two sons and one daughter: Don Ambrocio Mag-isa Ladyangbata, Don Luis Ylao, and Doña Maria Bolactala.