Raimundo Martín

Nació en Caleruega, cuna de Sto.

Tras estudiar filosofía en Corias y Salamanca fue destinado a México y más tarde a Guatemala, donde en 1944 fue nombrado obispo de diócesis de Trómede y más tarde obispo de la diócesis de Verapaz y Petén.

Raimundo estuvo presente en todas las sesiones del concilio Vaticano II y la Orden de Predicadores le llegó a nombrar Predicador General.

También recibió nombramientos por parte del gobierno guatemalteco, como la Orden del Queztal; y por el de España, la gran cruz de la Orden de Isabel la Católica.

El Ayuntamiento de su pueblo natal le ha puesto su nombre a la calle donde se encuentra la casa donde nació.