Fue de Europa que llegó el ganado vacuno, ovino y caprino, que se aclimató rápidamente a tierras venezolanas, creándose manufacturas lecheras, uno de cuyos productos más apetecidos desde tiempos coloniales fue el queso.
[3] Mayoritariamente los quesos venezolanos están elaborados con leche cruda lo que les dota de ese sabor especial que luego es difícil de replicar en otros países con medidas sanitarias restrictivas.
Los quesos venezolanos son frescos, ya que durante el proceso de elaboración no se dejan madurar y son preparados en procedimientos simples a partir de la cuajada.
La mejor manera de consumirlo es cuando está muy fresco, es tan delicado que casi se puede untar.
Se conserva a temperatura ambiente, señal de que hay que consumirlo rápidamente, pues al hacer contacto con el frío, se seca un poco y pierde su suavidad.
Su nombre obedece a que en su elaboración, una vez cuajada la leche se hierve y con la mano se le da forma de torta, que puede ser grande o mediana según sea el caso.
Los más famosos son los producidos en el Estado Guárico, aunque otras regiones del país lo fabrican también de excelente calidad.
Al consumirse rebanado, es común combinarlo con jamón cocido, ya sea en sándwiches, "balas frías" e incluso arepas.
Hay una variedad llamada queso churuguara que se elabora el la población homónima del estado Falcón.
Es versátil, para muchos es una especie de queso parmesano local, pues se le puede dar el mismo uso en las pastas.
Su elaboración es muy delicada, Es de textura cremosa, y sirve para freír, rallar, rebanar, etcétera.