Tiene un sabor fuerte descrito como similar al parmesano, salado, pero con notas más amargas.
Es de color amarillo claro y tiene un contenido graso del 31 %.
Algunos suecos lo consideran el rey de los quesos y su demanda a menudo supera su limitada oferta.
Debe envejecer un mínimo de 12 meses, siendo lo más frecuente 14.
Según la leyenda, se quedó sola removiendo la cuajada de un queso tradicional pero fue interrumpida, bien por otras tareas o por una cita con su amante.