Las pilas consisten en cuatro pilares cilíndricos de 1 m de diámetro por cada puente que se prolongan en pilotes in situ del mismo diámetro.
Las obras, tras la subasta realizada en abril del mismo año, fueron adjudicadas a Medardo Ureña.
[2] En 1958 llega su etapa final, ya que se decide construir un nuevo puente para sustituir a este, este proyecto fue llevado a cabo por Pedro González entre 1975 y 1976, ese mismo año de finalización el antiguo fue cortado al tráfico por no reunir las condiciones de seguridad necesarias y tener un tablero demasiado estrecho.
La poca consistencia del terreno en que se asienta le ha llevado a escorarse hacia el frente de aguas abajo.
[3][4] Durante 1924 y 1926, el río Guadalquivir rebosó más de su capacidad máxima posible, inundando varios pueblos de la comarca e inclusive casi llegando a la Torre del Oro.