La obra fue adjudicada al contratista Alberto Corral con un valor de 215.574 pesetas.
También fue instalada una tribuna en el Paseo de la Quinta, adornada con gallardetes y banderas, desde donde se pronunciaron los discursos institucionales donde intervino el alcalde, por aquel entonces Ricardo Amézaga y el director general de obras públicas, Rodolfo Gelabert.
Las décadas siguientes sufrieron pocas mejoras y el puente sufrió gran deterioro, es por ello que en el año 2000 se planteó la posibilidad de realizar una reforma general pero la obra quedó paralizada.
En 2005 comenzó a plantearse la idea de aumentar las dimensiones del puente.
Puentes de Burgos, escrito por Pedro Hombría, Gonzalo Andrés, Lena Saladina, María José, René Jesús y Ángel Moreno.