Después de la Primera Guerra Mundial y con la partición del Imperio otomano, la región fue ocupada por Francia y hasta 1938 formó parte del mandato francés en Siria.
[1][2] A efectos estadísticos, forma parte de la Región del Mediterráneo.
En 1936 Turquía hizo saber que no aceptaría que ese territorio, donde vivía una importante minoría turca, pasase a un estado sirio independiente; mientras fomentaba la instalación de turcos en la región.
En consecuencia, 15 000 armenios (excepto el pueblo de Vakıflı, Samandağ) así como otros cristianos árabes se exiliaron.
Posteriormente, Turquía incorporó a la provincia, en su lado norte, los distritos de Erzin, Dörtyol y Hassa, reforzando así su carácter turco.