[1] y que se dedica a estudiar las formas de favorecer una mejor salud en la población.
Desde un punto de vista patogénico la vida es un río embravecido que finaliza en una cascada y la muerte.
Sin embargo en el momento salutogénico en el río de la vida merece la pena mirarlo aguas arriba; el agua fluye y cada persona aprende a nadar ante los riesgos, utilizando los recursos generales de resistencia aprendidos y los activos disponibles.
Además utiliza no solo herramientas pedagógicas o comunicativas, sino también la abogacía y las intervenciones estructurales.
El hecho de que la enfermedad se encuentre en estrecha relación al medio social y cultural del hombre es una idea que ha estado presente en los médicos en épocas del pasado.
Sólo en la época moderna aparece una clara conciencia de los estrechos lazos que existen entre las condiciones sociales y los problemas médicos.
Álvarez explica que "la educación para la salud tiene como objetivo, transmitir conocimientos que motiven y potencien el saber y el saber hacer, así como el desarrollo de conductas encaminadas a la conservación de la salud del individuo, la familia y la comunidad, para lograr estilos de vida saludables.