La programación lógica gira en torno al concepto de predicado, o relación entre elementos.
El caso proposicional simplificado en el cual un programa lógico a un nivel superior de reducción atómica no contiene variables compuestas es un razonamiento que determina un árbol lógico, el cual constituye un espacio de búsqueda para resolver el problema.
El conjunto alternativo correspondiente de estas nuevas ramas está agrupado por el "o" lógico.
En el caso más general, donde los objetivos comparten variables, otras estrategias pueden ser usadas, como por ejemplo puede ser escogido el objetivo más altamente instanciado o el suficientemente instanciado para lo que implica un procedimiento.
La programación lógica permite formalizar hechos del mundo real, por ejemplo: y también reglas o restricciones: Ante dicho "programa" es posible establecer hipótesis que no son más que preguntas o incógnitas, por ejemplo: Gracias a que la lógica de primer orden es computable, el ordenador será capaz de verificar la hipótesis, es decir, responder a las incógnitas: Obsérvese que el programa lógico no solamente es capaz de responder si una determinada hipótesis es verdadera o falsa.
El lenguaje de programación lógica por excelencia es Prolog, que cuenta con diversas variantes.
Las siguientes referencias bibliográficas corresponden a literatura en inglés: Volume 13, Issue 3, September 2015, Pages 316–369 Existen pocas referencias a literatura en castellano: Este último sea posiblemente el mejor libro de programación lógica en español, ya que también contiene las bases de lógica matemática.