Las marcas, logos o imágenes como las de determinados personajes pueden licenciarse para su uso en productos como ropa, juguetes o productos de alimentación, fabricándose objetos que representan al elemento licenciado o utilizando en ellos las imágenes sujetas a licencia, en la confianza de que las ventas serán mayores que las del mismo producto sin tal imagen.
Algunas veces, el proceso puede ser el contrario, con la creación de la película o serie televisiva a partir del juguete original.
El primer ejemplo importante de esto último fue la serie He-Man and the Masters of the Universe, a comienzos del decenio de 1980, si bien esta ya es una práctica común en la programación infantil.
Entre los productos específicamente dirigidos a jóvenes y adolescentes destacan los relacionados con deportes y, sobre todo, los relativos a grupos o estilos musicales, incluyendo los diseñados directamente por mercadotecnia como las boy bands o el formato Idol japonés.
Puede darse también el caso de que una marca o producto sin relación con la industria del entretenimiento obtenga el suficiente reconocimiento y popularidad como para que su simple inclusión en un objeto sin relación alguna con ella aumente las ventas del mismo.