El priorato de Santa María del Coll la Perxa fue un antiguo priorato benedictino y hospital de peregrinos del municipio de La Cabanasse (Alta Cerdaña).
El conde Sunifredo de Cerdaña donó el lugar a la abadía de Arlés en 965, pero el priorato no consta hasta el fin del siglo XII, regido por un monje del monasterio de San Miguel de Cuixá a título de prior.
Por su situación tuvo la función de refugio de peregrinos y adquirió gran vitalidad el hospital, que ya en 1235 recibió privilegios del conde Nuño Sánchez.
En 1682 Luis XIV lo unió al Real Orden del Carmen y San Lázaro de Jerusalén y en 1696 dio sus rentas al hospital de pobres de Perpiñán.
En la Cabanasse se guarda una imagen del siglo XVII con el nombre de Santa María de la Perxa, protectora de viajeros.