Portulacaria namaquensis

La savia es resinosa e inflamable y las raíces son suculentas, con una corteza de color marrón cuando están expuestas.

[2]​ Las plantas maduras presentan un tallo principal solitario del que se está desprendiendo constantemente la corteza coriácea.

La corteza de color claro refleja el sol asegurando tallos más frescos.

Portulacaria namaquensis fue descrita por el botánico alemán Otto Wilhelm Sonder y publicada por primera vez el libro ilustrado Flora Capensis 2: 386 en el año 1862.

[6]​ Se cultiva principalmente como planta ornamental, en suelos bien drenados, arenosos y con grava.

Detalle del tallo ramificado
Detalle de las hojas
Portulacaria namaquensis en su hábitat