[2] En época medieval, perteneciendo las canteras al monasterio de Santa María del Carme, los lugareños las llamaron portals, (portales) por su similitud con una gran puerta.
La leyenda narra que en el siglo XV unos navegantes genoveses toparon con un fuerte temporal.
La cala de El Mago debe su nombre a una película que se filmó allí en 1967 con Anthony Quinn, Candice Bergen y Michael Caine como protagonistas.
[3] En principio la película debía ser rodada en Grecia, pero el golpe de Estado ocurrido ahí, hizo que la productora mudase el escenario y el nuevo lugar escogido fuese Mallorca.
Las críticas cinematográficas se deshacían con elogios hacia el precioso lugar del Egeo, hasta que un emigrante mallorquín escribió a las publicaciones para demostrarles que en realidad se trataba de una playa mallorquina y no de un lugar en Grecia.