Se basa en el Porsche 911 que, aunque es similar a este último, cuenta con numerosas mejoras, tales como: el motor bóxer de seis cilindros enfriado por aire, frenos más grandes, más rígido y una calibración de la suspensión especial.
Se utilizó el Salón del automóvil de Essen de 1994 para lanzar su nueva creación: Un 911 Turbo llevado a otro nivel, revisado hasta el límite y con una nueva e imponente presencia, llamado Porsche 911 GT2, con toda la potencia dirigida al tren posterior.
Sería dos años antes de que un nuevo GT2 llegaría y durante ese tiempo, Porsche decidió abandonar el GT2 para los deportes de motor para concentrarse en el nuevo Porsche 911 GT3.
Contaba con una potencia de 462 CV (456 HP; 340 kW) a las 5700 rpm y un par máximo de 620 N·m (457 lb·pie) a las 3500 rpm, en comparación con el 911 Turbo de 415 CV (409 HP; 305 kW) y 415 N·m (306 lb·pie), respectivamente y que luego se incrementó hasta 483 CV (476 HP; 355 kW).
De acuerdo con las pruebas en carretera realizadas por la revista Car and Driver, el GT2 no sufre casi ningún retraso del turbo (turbo-lag).
En estas situaciones es muy útil a 196 mph (315 km/h), con lo que los ingenieros lo llamaban como el Porsche más potente jamás construido hasta antes de la llegada del Carrera GT.
Estos tenían como característica unas pinzas (cálipers) amarillas, un detalle que se conserva hasta hoy en día y como parte del equipamiento de serie.
Un año después llegó el Ferrari Enzo, también con frenos carbono-cerámicos y, posteriormente, en el Carrera GT de 2003.
En su interior contaba con la fórmula vista en el GT3 de la época, ya que se podía equipar con un paquete Clubsport con jaula antivuelco y baquets, además de su estética que estaba definida por sus nuevas defensas, por las branquias laterales encargadas de alimentar al motor biturbo, el generoso alerón posterior, que a diferencia del Turbo contaba con una regulación manual y una nueva salida de aire ubicada entre el cofre y la defensa delantera.
La curva de par alcanza su punto óptimo un poco más alto en el rango de rpm, pero es abundante y hay tan poco retraso en la aceleración del turbo que el piloto debe tener cuidado con acelerador, particularmente en las marchas más bajas.
Este caro material reduce el peso en aproximadamente 50% en comparación con un componente hecho de acero inoxidable en solamente 9 kg (19,8 libras).
El spoiler delantero tiene hilos de acero para que los 200 kg (441 libras) de fuerza que puede llegar a recibir del aire no deformen esta pieza y cambie la aerodinámica.
Para conseguirlo, han recurrido a soluciones como unos turbocompresores más grandes y al ya anunciado sistema que pulveriza el aire de admisión enfriado por agua.
El motor está acoplado únicamente a una transmisión PDK de 7 velocidades con levas detrás del volante, por lo que no habrá una versión manual.
Exteriormente destaca por sus aletas ensanchadas, algo necesario para albergar los neumáticos de alto rendimiento en medidas 265/35 ZR 20 pulgadas (50,8 cm) en el eje delantero y 325/30 ZR 21 pulgadas (53,3 cm) en el trasero, en el caso de estos últimos encargados de hacer que se transmita al asfalto la potencia a través del eje trasero direccional que le proporciona agilidad a baja velocidad y estabilidad en alta.
El alerón trasero de grandes dimensiones es necesario para mantener bien pegado el eje posterior al suelo.
En cuanto al interior, cuenta con alcantara rojo, cuero negro y mucho carbono de serie como los elementos predominantes en el habitáculo.
El aro del volante también va tapizado en color rojo y en las puertas cuenta con detalles en el mismo material.
Incluso este vehículo de carreras, con su suspensión McPherson en el eje delantero y una multibrazo Porsche con sistema LSA para el eje trasero, se parece mucho a la versión de producción.
Además, recibe modificaciones en la carrocería y según las regulaciones, se permiten neumáticos más anchos.
[24] En el Salón del Automóvil de Los Ángeles de 2018, fue develado el Porsche 911 GT2 RS Clubsport, la variante más poderosa que es exclusivamente para competición por lo que no podrá circular en las calles, sino solamente en los circuitos y eventos privados.