Pomacos

En Bulgaria la teoría más extendida es que se trata de búlgaros que se convirtieron al islam en el período otomano para librarse así de la djiziya, una impuesto cobrado por los gobernantes turcos a los no musulmanes en todos los Balcanes.

Su dialecto se ha adecuado al búlgaro normalizado; hay una fuerte tendencia a la eslavización de los nombres musulmanes y se han denunciado frecuentes hostigamientos y presiones para su conversión a la Iglesia ortodoxa.

La mayoría de las personas que fueron expulsados por los comunistas búlgaros en 1989 eran étnico turcos no pomacos.

A pesar de los derechos que se reconocían en dicho tratado, a los pomacos nunca se les permitió que utilizaran su lengua para la enseñanza más allá del jardín de infancia.

En 1953, en plena Guerra Fría, el Estado griego decidió impartir la educación en las zonas pomacas en turco, para alejarlos de la influencia búlgara.