Poder temporal

Se llama poder temporal a la influencia de poder, tanto gubernamental como político, que ejerce la Santa Sede sobre los pueblos, en particular al vicario de Cristo o Papa, en contraste con su poder espiritual sobre la Iglesia católica y otros grupos también llamado poder eterno.

Este poder o actividad trajo consigo el estado papal autogobernable, el cual actualmente se limita a la Ciudad del Vaticano.

Algunos historiadores clasifican la coronación de Carlomagno, en el año 800, como el momento en que la Iglesia católica comenzó a aplicar una política internacional del poder temporal.

El poder temporal siempre ha sido discutido en la política, la filosofía y la teología en las naciones donde la Santa Sede ejerce este poder en diferentes grados, siendo que este poder es aplicado dependiendo del Papa en cuestión, el tiempo y las constituciones y el apoyo popular del pueblo católico.

La discusión en los círculos políticos, filosóficos y teológicos se centra en que este poder ha sido mal usado para beneficio de unos, llevándolo así a estar apartado del poder eternal o mejor dicho alejándolo de las doctrinas religiosas en cuestión.

Efigie de la tumba de Bonifacio VIII con doble tiara de Arnolfa di Cambio, en el Museo dell'Opera del Duomo de Florencia.