Plaza de toros de la Real Maestranza de Granada
Para ello obtuvieron permiso del Ayuntamiento para iniciar las obras en un lugar extramuros de la ciudad, próximo al Barrio de San Lázaro; lugar en el que, finalmente, entre 1768 y 1769, terminaría por construirse este coso taurino.[4] Además de esta institución nobiliaria, la plaza era cedida temporalmente a hermandades e instituciones para que pudieran celebrar también diferentes festejos benéficos con los que recaudar fondos.[5] Los festejos taurinos celebrados en la Real Maestranza de Granada contaban con una doble presidencia: una honorífica y otra efectiva.La presidencia de honor la ostentaba el cuadro del monarca que, se situaba bajo dosel, y la efectiva la ejercía el teniente de hermano mayor o algún corregidor.Asimismo, por costumbre, los toreros se vestían con el uniforme de esta corporación nobiliaria: "para que con librea de la hermandad, sirva la plaza y mate los toros".