Se encuentra entre las calles Tapia de Cruz, Yrigoyen, Estrada y Asborno.
Fue pintada de color blanco, con pequeños detalles como laureles y un sol.
Están realizadas en bronce y colocadas sobre bases de ladrillo.
Esta obra fue realizada por José María Felix Sergiani e inaugurada en el año 1968.
Así pues, Félix Sergiani realizó esta obra para engrandecer la figura materna que él mismo tuvo en su vida.