Esta pequeña playa no tiene utilización para los bañistas y está situada en el mismo puerto de Ortiguera, en la zona oeste del mismo del que la separa la desembocadura de un arroyo.
A pesar de no ser apta para el baño, tiene un entorno con un gran atractivo.
Además, la presencia del puerto pesquero le da un ambiente marinero típico y tradicional.
En los días despejados y sin brumas en el horizonte se aconseja acercarse al faro de San Agustín y disfrutar de las excelentes vistas que se ofrecen.
También se encuentran vestigios de la arquitectura megalítica en el «despoblado del Castillo» y una estela discoidal que ha sido declarada monumento nacional.