Es eficaz en trastornos cognitivos, vértigo, mioclonía cortical, dislexia y anemia falciforme; las fuentes difieren sobre su utilidad para la demencia.
Es un derivado cíclico del neurotransmisor GABA [2] y comparte la misma estructura base con el ácido piroglutámico.
El fármaco recuperado en la orina, un 90-95%, se encuentra sin modificación pasadas 24 horas después de su ingesta oral.
[5] Aunque se han hecho pocos estudios sobre el uso del piracetam en mujeres embarazadas y en período de lactancia, los especialistas aconsejan no utilizar el medicamento.
También se ha visto su consumo en gente que toman otras drogas más duras para paliar algunos efectos secundarios neuronales.