Hay un ligero dimorfismo sexual, pues las hembras son más opacas.
Se distingue del rascador pardo por tener la garganta color óxido y el vientre gris oscuro.
Se alimenta en el suelo o entre los arbustos; prefiere semillas y algunos insectos.
El nido es una taza voluminosa elaborada de ramitas, tallos, pastos y cabello.
La puesta consiste de 2 a 4 huevos blancos azulosos con algunos puntos parduzcos, que la hembra incuba sola durante 11 días.