Predicaba, confesaba, celebraba la misa, administraba el Santo Sacramento, enseñando a los fieles la adoración y la veneración a María, madre de Jesús, siguiendo el ejemplo de Juan Francisco Régis.En 1714 edificó un viacrucis al que llamó El Gran Viaje (Le Grand Voyage en francés).[3] Este viacrucis es recorrido aún por la gente del lugar el día de Viernes Santo.Pedro Vigne fijó su residencia en Boucieu-le-Roi, adonde volvía entre una misión y la siguiente.Les confió la tarea de enseñar a las jóvenes y creó escuelas regidas por estas religiosas.Enseguida, la pequeña congregación creció y se instaló en el castillo de Boucieu-le-Roi, una vieja fortificación que dominaba el pueblo.La Revolución francesa dispersó a las religiosas, que continuaron con sus obras de caridad en la clandestinidad.Durante su última misión en el Macizo de Vercors, en Rencurel, estando enfermo, no pudo acabar su prédica y se apagó mientras rezaba.Su cuerpo se llevó a Boucieu-le-Roi donde fue inhumado en una capilla de la iglesia.
Boucieu-le-Roi, vista panorámica
Misa de campaña en Peña Amaya (España) el 22 de julio de 2012 organizada por la comunidad de Religiosas Sacramentistas de
Sasamón
y el Grupo de Amigos del Beato Pedro Vigne.