Pericarditis

La pericarditis es una enfermedad no contagiosa producida por la inflamación del pericardio, la capa que cubre el corazón.

Las patologías cardíacas que pueden provocar pericarditis son, entre otras, infarto de miocardio y miocarditis.

En ocasiones, algunos tratamientos como la radioterapia del tórax y la utilización de inmunosupresores también inducen esta condición.

Sin embargo, en la población infantil la pericarditis y miocarditis están entre las manifestaciones clínicas más frecuentes debidas al lupus eritematoso sistémico (les), que aunque es una enfermedad poco frecuente en niños, ocupa el segundo puesto entre las mesenquimopatías infantiles.

Igualmente, puede haber otros signos que revelen la presencia de derrame pericárdico.

La pericardiocentesis puede ser percutánea (utilizando una aguja para alcanzar el pericardio, guiada por una ecocardiografía, en la sala de procedimientos) o quirúrgica (realizada en el quirófano como cirugía menor).

La pericarditis puede variar de casos leves que se resuelven por sí solos hasta casos complicados y potencialmente mortales por la acumulación de líquido alrededor del corazón y el funcionamiento cardíaco deficiente.