Pena privativa de libertad

Además, su fin es distinto: la pena privativa de libertad tiene como fin castigar (penar) al condenado por el delito que ha cometido así como la reinserción social del individuo que trasgrede la norma, mientras que la prisión preventiva tiene la finalidad de evitar una posible fuga del acusado o la posible destrucción de pruebas.Una revisión sistemática de 14 estudios realizados en Estados Unidos, Europa y Australia, desde 1961 hasta 2013, concluyó que las penas privativas de libertad no son mejores ni peores que las penas no privativas de libertad para reducir la reincidencia.Si bien algunos estudios sugieren que las tasas de reincidencia son mayores en aquellos que van a prisión comparados con aquellos a quienes les dictan penas no privativas de libertad, estos resultados probablemente estén sesgados.Vemos por qué: Por todos estos motivos, se intenta llevar a cabo una sustitución de la pena de prisión, que tienda a una verdadera reinserción y resocialización del reo.Esta modificación ha sido criticada porque se considera que no ayuda a la resocialización del condenado.