46, es la música incidental compuesta en 1905 por Jean Sibelius para Peleas y Melisande (1892) de Maurice Maeterlinck.
[2] En el movimiento inicial las cuerdas introducen un corto tema atmosférico que luego es retomado por los vientos madera.
Sigue un intermezzo (A la orilla del mar) que Sibelius sugería omitir en las ejecuciones en concierto.
Las cuerdas continúan con las densas sonoridades del material melódico de una fuente en el parque, seguido de las tres hermanas ciegas en el que nuevamente el corno inglés interpreta una melodía respondida con armonías monolíticas asignadas al resto de la orquesta.
El séptimo movimiento presenta la imagen más larga y dramática de las anteriores.